Debo admitir que disfruté de la película y que sentía los nervios a punto de explotar y no me arrepiento de haber ido a verla como en otros casos.
Pensé que reflejaba lo que sentía un soldado en la eterna guerra de Irak, la cruda realidad de la ocupación militar de ese país y un poco las condiciones en que viven sus habitantes quienes pueden ser víctimas o guerrilleros y que esta película era una declarada protesta de lo que tenían del vivir en un terreno hostil. Pero qué ingenua que fui. Zona de Miedo (The Hurt Locker) es solo una larga propaganda para el ARMY.
Poco faltó para que el sargento William James (Jeremy Renner), mire la pantalla de frente y diga: “Ven a disfrutar de la adrenalina como yo inscribiéndote hoy mismo al ejercito”
Deja en claro además, en la secuencia de su casa, dos cosas:
-El ejército necesita más desactivadores de bombas en Irak.
- La familia no es algo que importe al crecer, el ARMY lo es todo.
En mi opinión le dieron el Oscar, entre otros premios, a la mejor propaganda del ARMY
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