jueves, 20 de septiembre de 2007

El mentisan no sana el alma


Ayer por la tarde dirigiéndome hacia la oficina recordé una breve anécdota, que en su momento no me causó gracia, pero ayer me reí mucho.
Ignoro porque pero de pronto recordé una escena del colegio donde Cinthia Vega tenía puestos un par de guantes de color rosado, de seguro era época de invierno, eran de esos guantes, que muchos de nosotros seguro hemos tenido, tejidos de lana con un forro de cuero en el dorso de la manos y con dibujitos de cualquier cosa. Cinthia se sacó el guante izquierdo y haciéndolo un bollo lo puso entre el dorso del guante y el dorso de su mano. Agarró un libro de álgebra Baldor y le pidió a Alejandra Penacho que sostuviera el libro, así lo hizo Alejandra y Cinthia le pegó un tremendo puñetazo. Todo bien porque hasta las niñas jugamos a ser boxeador@s, lo malo es que Alejandra no puso mucha fuerza al sostener el libro y lo peor es que lo sostuvo a la altura de su carita y fue donde recibió el terrible y doloroso impacto.
Recordar esa situación me causó tanto chiste que ni yo podía creer la intensidad con que me reía, pero luego me dio melancolía por aquel tiempo en que para curar nuestras dolencias más grandes bastaba con un poquito de mentisan y ya.

5 comentarios:

Luna dijo...

si pudieramos curar las heridas con mentisan o un jarabe?
quizas seria mas facil, pero creo que los dolores esos del alma, son los que nos hacen ser mas fuertes al final de todo? no crees?
de niña recuerdo que el mentisan y el agua con azucar...eran los remedios para todo..
jaja
si, ahora es mas complicado que crea que sanan los dolores del alma.
besos

elojosinpaz dijo...

ayyyyyy.. Mari jo tiene esos guantes rosaditos con lila... Sos bella Lutchi. Te quiero un montón.

nois de lean dijo...

si bastara mentisansito... ya decia mi abuela, para esos ratos bien malos lo único que te calma es dormir

Hada del tejado dijo...

Mi Lunita querida es verdad que lo que no nos mata nos hace más fuerte pero prefiero los coarazones libes de corazas de protección y fortalecidos a punta de desilusiones.

Verito yo también te quiero muchísimo. Qué coincidencia recordar mi infancia y que Mari Jo justo tenga los mismos guantes.

Nois De Lean bienvenido a mi blog y bueno sí, las abuelas son los seres más sabios de la tierra, no queda más que dormir

Vania B. dijo...

Yo necesito una untada de mentisán, de crin a cola. Y no son males del corazón, creo que ya pasé esa etapa (que chistoso). Son TANTAS responsabilidades, TANTAS que ni me quedan fuerzas para renegar ni histeriquearme, estoy así como globito desinflado. En fin. Fue lindo leerte querida Luchi.

Vuelvo al deber.

Un abrazote.